lunes, 21 de diciembre de 2015

LOS RESULTADOS DE HOY (o la abstención como delikatessen)





Por aquello de las "emergencias partitocráticas" emanadas de la postmodernidad tardía (podemismo, ciudadanismo, animalismo...), la abstención ha bajado cuantitativamente pero, precisamente por resistirse a tales "emergencias", ha ganado en calidad. Junto con papeletas en blanco o con algunos votos a opciones que mayormente no salen en la foto (con el PCPE a la cabeza en cuanto a referencia moral) o están dejando de salir (aludo al sector de IU más dispuesto a priorizar al PCE frente a los cantos de sirena gauchoatlantistas -el resto de la coalición me importa un carajo: no están con Pablillos de manera explícita porque éste los rechazó en su cerrazón megalómana, no por falta de ganas de mantener la mixtificación rojimorada, de la que por otra parte siguen formando como figurones en las franquicias periféricas podemitas...-), esta abstención implica la auténtica ruptura de consenso con el constantinismo UEccidental, el cuestionamiento categórico del yugo usaco, la desobediencia a las directrices rusófobas, la recuperación del DECORO (sea -desde un extremo- como recordatorio de que la Revolución, si lo es de veras, tiene más que ver con Esparta que con Sodoma, sea -desde la otra acera- como contestación a una derecha en permanente autotraición por mero apetito de poltrona y aforamiento) frente a la PICARESCA, la apuesta por la realidad compleja y conflictiva frente al reality pseudocainita y tongado hasta lo más hondo de sus sinárquicas esencias, la voluntad de CONSTRUCCION frente a la entropía disolvente y la inmunodeficiencia social, la atención a las RESPONSABILIDADES frente a la inmensa falacia de los ¿derechos? (en realidad, caprichos).

Es poco pero es algo. Y, desde luego, EL FUTURO (cada día más multipolar y alejado de las terminales arrogadas por el NOM y la americanosfera) TIENE MAS QUE VER CON ESE POCO QUE CON UNA MAYORIA PIRRICA ABOCADA A LA NADA.

Como colofón, bienvenido sea el inminente nuevo inquilino de la Casa Blanca (Hillary o Trump) porque, antimateria en ambos casos del fraude Obama (desde la musculada derecha demócrata con ribetes nixonianos de la climatérica Lady Macbeth o desde el histriónico primitivismo del magnate bocazas), va a hacer más difícil el doble lenguaje de la ¿izquierda? UEccidental y troskoide, ese lenguaje ofidio de felaciones dialécticas a Washington combinadas con exabruptos y blasfemias y provocaciones guerracivilistas de salón a una "derechona" ficticia (porque la derecha real abarca todo el arco parlamentario que desde hoy se va a repartir el bacalao más sus correspondientes lobbies financieros, mediáticos y sociales): va a serle más arduo al buscón Pablillos vender a su público eso de cuánto le gustaría ver HOUSE OF CARDS en compañía del mandatario usaco y convencernos de que Hillary o Trump son más tranquilizadores que el "inquietante" Putin. Ese limbo de pornografía política buenrrollista en la forma y criminal en sus actuaciones que, a partir del caballo de Troya del 11M, dio pie primero a ZP y luego a su amito Obama, ya no va a tener espacio. La obscenidad de la "zona gris" en breve dará paso al dilema crudo de con quién se está, si con la Roma terminal de UEccidente o con la Tercera Roma de Moscú. Porque, como todo buen KR (Konservador Revolucionario) sabe, tanto la Revolución como la noción de Sacro Imperio convergen en la capital de E-U-R-A-S-I-A.



jueves, 17 de diciembre de 2015

Un día de furia, como otro cualquiera

Esto lo escribí hace unos días. Creo que no ha perdido vigencia, y me temo que no la perderá en algún tiempo. ¿Ataque de ira? ¿Hartazgo? Yo que sé...


De forma ínclita y pejigueras, con nocturnidad y exhibicionismo más allá de toda pornografía —elegante, cual huevo de Fabergé, comparado con este trago de julepe de mierda—, ha empezado, si es que no lo había hecho hace eones, en un continuo espacio tiempo regurgitable, la campaña electoral. No se esperen un análisis político, no se esperen acertadas disgregaciones sobre los candidatos y sus contradicciones. Eso es detritus de cloaca que no merece ser leída por ustedes, seres luminares. Eso lo dejamos a los fachas, a los progres, a los fachiprogres y a los progrifachas. ¡Ah, bueno, que eso ya está en desuso! Los fachas y los progres no existen. Todos ellos son DE MO CRA TAS CO MO LA CO PA DE UN PI NO. A los que quieren todo el té de China en sus bolsillos o asaltar los cielos viajando en Raynair o que se les tenga en cuenta porque al fin de al cabo hay ganado homínido que les vota en una urna de plástico con papel barato en forma de volente —no del de los coches, sino el tamaño de la dichosa papeleta—. 
Y para colmo de males, me ha tocado suplente de Presidente en una mesa. ¡Vayas censos de mierda tiene el CNI! O al contrario, ¡saben cómo joder la marrana! Domingo, 8 mañana. Ojeroso y malencarado miro la fiesta de la democracia como un extra a las Pascuas. Quiero una batería de cocina de Ciudadanos, un plumier de Rajoy, la coleta morada del buscón llamado Pablillos y del otro con pinta de policía municipal quiero que me deje en paz. Quiero que me dejen en paz todos. Quiero que Expaña no sea un país de tertulianos. Son deseos que caen en el saco roto de un sistema que no acaba de romper. ¡Putin, ven a pegar una patada!  ¡Una patada tuya bastará para sanarnos!


Mejor, deseo que todo estalle en mil pedazos, y que como materia vagando por el vacío interestelar nuestros átomos olviden que alguna vez fueron votantes, en un país llamado España, de un bloque llamado UE, aliado de USA para manosear pueblos igual de oprimidos pero más pobres.



Esto es una vomitona de berrinche de tarde de viernes. Una tarde de viernes en la que estoy que me salgo del pellejo. Y lo peor de todo es que todos ellos ríen, todos ríen. 
Y a esto no le veo yo ni puta gracia.


miércoles, 9 de diciembre de 2015

HOLOGRAMAS (TAN PLASTICOS COMO PLASTAS)




No sigo los debates. Ocasionalmente un reojo a los comentarios de los mismos en alguna teletertulia, que me los acaba de empequeñecer. Y no digamos esos inmerecidos furores (uterinos o no) con que son tratados en FB.

Reconozco, sí, esa constatación constante, empezando por lo físico, del tongo general donde la atocinada belleza de Soraya (actuando como escudo humano de la ausencia mayestática -mayestática en tanto que ausencia- de su jefe, el interino y habsbúrgico Rajoy) es casi lo único que me inspira una cierta ternura en su impostada lidia contra el tedioso caracartonismo de Sánchez (ideal presentador de una Teletienda en que se incitase a las gentes a desprogramarse del consumismo por mor de la sosería de quien vende la moto), el mesianismo hidrocéfalo de Iglesias (cada vez más encanijado e histriónico en su megalomanía liliputiense, como un Michael J. Fox jugando a Cristo de Pasolini) y el aire de consorte de Barbie de Rivera (quien siempre aparecerá a mis ojos con la asexuada desnudez -todo consorte de Barbie es asexuado en su desnudez- de su primera campaña electoral y dejándome la impresión de que "no será tan grave lo que pasa en Cataluña" cuando las desmesuras independentistas se denuncian de aquesta guisa tan frívola). Cabe añadir al ausente de esos debates, al doncel Garzón, clónico en morenito de Juan Carlos Naya, y a quien uno no imaginaría al frente de las siglas que encabeza sino como partner/víctima de Vicente Parra en alguna cinta truculenta de Eloy de la Iglesia (ocupando el lugar de un Tony Isbert o un Eusebio Poncela -ahora que lo pienso, don Eloy no haría ascos al eterno joven Rivera si nos atenemos a esos comienzos nudistas antes mentados, aunque dudo lo aprobase como caudillo político, lo mismo que a Garzón-).

Hay algo como de MELROSE PLACE en esa estilización efebócrata de nuestros presuntos líderes, sólo contrastada por la fealdad esperpéntica de otros nombres, como sacados de una conjunción de Xavier Sardá + MONDO BRUTTO en su común afán de bizarrerías, y en los que lucen primorosos, aparte algunos nombres del actual gabinete, los teratogénicos Oriol Junqueras, Iñigo Errejón (éste como sacado de una cinta de Troma -empollón de laboratorio a punto de crear una nueva raza de Zapateros mutantes y mu tontos-) o la inefable Ada (sin h) Colau (como secuela supervitaminada e hiponeuronada -lo de hipo en su doble sentido de carencia de luces y de hechuras percheronas- de una Dolores Ibarruri en los años de la República).

Todo es irreal. Como si tras las bambalinas moviese los hilos un guionista desahuciado de GH con ínfulas de Santiago Segura o Joaquín Reyes. Kang y Kodos, camuflados de Clinton y Dole, daban una mayor sensación de conflicto real, de dilema incitador de penetraciones en las urnas. Y fuera de EXpaña vemos cómo una Marine Le Pen, un Vladimir Putin, una Merkel, una Hillary, hasta ese terminal emperador romano llamado Obama o el grotesco Poroshenko, existen y deciden y mueven pasiones a favor o en contra que sabemos trascienden la mera ficción. Aquí preferimos autoengañarnos y dar pábulo de realidad a lo que hace ya más de una década (concretamente, desde cierto 11 de marzo) no es sino un siniestro desfile de hologramas. Tiene todo el sentido que el reciente anfitrión de prohombres, el señorito Osborne, sea preferido a sus invitados en los sondeos presidenciales (desde luego, da mejor en las entrevistas).





lunes, 7 de diciembre de 2015

NO HAY MAL QUE POR BIEN NO VENGA



Con el derrocamiento a la nicaragüense del bolivarismo continúa el dominó de recuperación usaca de su patio trasero. Ya sólo falta el apeamiento de Rousseff para volver a la época de la Guerra Fría con una Cuba rusófila y una Nicaragua basculante (anécdotas como Bolivia y Uruguay son cuestión de tiempo que caigan tras las otras grandes piezas). La constante picaresca caudillista que condiciona (siempre bajo la sempiterna sombra de Perón) cualquier devenir alternativo en el subcontinente (excepciones, las justas -nunca mejor dicho-: Velasco Alvarado, Arbenz, Goulart desde la honradez cabal y el Che y Abimael Guzmán desde el fanatismo autosuficiente...) confirma una vez más que las energías que puedan poner en otras latitudes (asiáticas, eslavas...) en configurar choques polemológicos hasta el último aliento, allí sólo se vuelcan en conflictos vinculados al narcotráfico (en eso sí que van a lo que les cruje -valga la mejicanada, país por cierto paradigma de lo que acabo de decir con aquella síntesis magistral de demagogia y cleptocracia que es lo revolucionario/institucional-). El gran problema del subcontinente, nacido de una mezcla de corrupciones (la ya existente en los imperios precolombinos más la añadida por los aventureros conquistadores -algo que sólo muy pocos, como D.H. Lawrence en LA SERPIENTE EMPLUMADA, han sabido diseccionar-), es su tormentosa relación con la realidad, siempre escapando a la aceptación responsable de ésta a través de pomposos autoengaños y falaces burbujas cortoplacistas que llevan una y otra vez a Latinoamérica a construir grandes proyectos sobre arenas movedizas. Una URSS (hoy tuneada en la Rusia Unida de Putin), una república islámica de Irán, una China maoísta y postmaoísta son impensables en Latinoamérica (algunos dirán que para bien -bueno, sarna con gusto no pica...-).  

Quizás lo más positivo de toda esta historia (donde sólo prima, en una entropía constante, el dicho tan querido por Perón de "OTROS VENDRAN QUE BUENO ME HARAN") es que los usacos se concentren más en administrar su patio trasero y abandonen poco a poco sus desastrosas incursiones en Oriente (el nuevo escenario, tan a la medida de Kissinger -asesor oficioso de la previsible nueva inquilina de la Casa Blanca-, permitiría recuperar iniciativas de distensión hacia el Este -como en los mejores momentos de la diplomacia norteamericana- sin volcar por esos pagos la frustración que causó en Washington la llegada de Chávez y su dominó de desobediencias en la región -no mucho después de tal llegada, recordemos, se provoca con la turbia mascletá del 11S la espiral de desatinos usacos en Oriente Medio, Norte de Africa y Asia Menor-).