lunes, 11 de septiembre de 2017

LA BIBLIA EN PESTE



a Beatriz, que me enseñó el arte del nanocuento


-Oh, Señor, ¿por qué a mí?

Preguntó la rata Job en el laberinto. Y el Señor, ajustándose las lentes de montura plateada y componiéndose con un punto de coquetería la bata blanca, le respondió con torrencial jovialidad (que viene de Jove, todo sea dicho):

-Nos ha jodío, porque un día de éstos me dan el Nobel. Vamos, ratita, tú a lo tuyo. Verás como superas también esta prueba...