"Cuando estaba en la cárcel, leí en la revista Life un artículo que mostraba a una niña china, de 9 años: su padre estaba a cuatro patas y ella apretaba un gatillo porque él era un chino "tío Tom". Cuando allí tuvieron la revolución, cogieron a una generación entera de "tíos Tom" y simplemente los liquidaron. Y en diez años esa niñita se convirtió en una mujer adulta. Se acabaron los "tíos Tom" en China. Y hoy es uno de los países más fuertes y más temidos de este planeta: para el hombre blanco. Porque allí ya no hay "tíos Tom"".
Malcolm X
6 comentarios:
Qué incorrecto todo, Luigi: la niña, la pistola, el gatillo, el tío Tom (aún más ahora, que diría Osama), pero mira tú que tenía razón Mr X, porque con Mao o sin Mao (a años-luz de aquella China postrada, troceada, dividida y llena de opiófagos, de abuelos de Charlton Heston campando a sus anchas, de últimos emperadores -y de sus abuelas con aspecto de gárgola pintarrajeada: o sea, de vicepresidenta española- y de eunucos pirómanos), la impronta dejada por la gesta roja y la Revolución Cultural ha permitido que su capitalismo mutante, sincrético de tantas cosas (y ninguna ni debole ni light ni buenrollista ni mucho menos modelna), la haya convertido hoy en la primera potencia mundial (sea sólo por tener cogido a Occidente por los cataplines de la deuda y del flujo comercial y económico). Sin Mao, seamos serios, no se concibe al tío Ho y sin éste Vietnam no sería la Irlanda asiática sino seguiría siendo la casa de putas de los franchutes o, formalmente independiente, una Thailandia gabacha donde las niñas harían cosas bastante más indignas (en tanto que no las harían libremente -René Scherer siempre en nuestra memoria, loado sea-) que la de tu anécdota.
Con lo que se demuestra que sólo había una intuición válida en aquella paja disforme del 68, la querencia maoista, en la que bastantes jóvenes occidentales se acercaron a otros mundos más periféricos y a otras razas no desde el paternalismo oenegero y avasallador (predación colonialista disfrazada -literalmente, por aquello de los desnaturalizados residuos hippies- de pieles de cordero) sino desde la admiración y el respeto con que otros jóvenes, en los años 30, sedientos de razas y carismas superiores y hartos de la mierda terminal que les rodeaba en sus entornos inmediatos (esa Francia inmunda que describe Drieu en sus novelas y ensayos), pusieron los ojos en Berlín o en Moscú.
Sí, pero Mr X le pidió peras al olmo y así le fue. Los negros nunca estuvieron por la labor. Porque, como bien dice Takla Makan, "la Revolución comienza, evoluciona y finaliza en el interior del hombre y después irradia hacia el exterior". Hay que tener muy en cuenta el hecho de que los chinos llevaban practicando "chán" (o sea, zen) casi dos siglos cuando hicieron su Revolución.
De ahí la fascinación esotérica de nuestro zenmeister (él, tan versado en esoterismos políticos) por Mao y su revolución. También, el fallecido Pino Balzano, interesante personaje que aparece ocasionalmente por la saga corazonesca, thiriartiano en su juventud y estaliniano en sus últimos tiempos, dejó un curioso texto en PVO donde destacaba las relaciones entre maoismo y taoismo. Sin olvidar a la (ya que estamos) corazonesca Alicia Luxemburgo, quien siempre me decía que los hombres (políticos) de su vida eran Nietzsche, Lenin y Mao (a destacar la ausencia de Marx -según ella, Lenin y Mao tenían más que ver con Nietzsche que con Marx-).
Claro. Por cierto, donde dije "casi dos siglos" tenía que haber dicho "casi dos milenios", que el chán se desarrolló en China a partir del siglo VI d.C.
A quien acaba de preguntar si el anuncio de EL CORAZON DEL BOSQUE en LDS está en vigor: pues sí, lo está. Un consejo: yo me las piro en breve de Madrid hasta mediados de enero, por lo que no podré atender los pedidos. Mejor se espere a esas fechas y, MUY IMPORTANTE, cuando haga el envío de pasta, mande un mensaje avisando para estar yo alerta (tampoco me paso por el apartado cada dos por tres).
y sin éste Vietnam no sería la Irlanda asiática sino seguiría siendo la casa de putas de los franchutes o, formalmente independiente, una Thailandia gabacha donde las niñas harían cosas bastante más indignas
Algunos datos contundentes sobre la prostitución forzada y el tráfico de mujeres y niños en Vietnam. Yo no diría que las cosas hayan cambiado mucho...
Publicar un comentario