“Cayó la noche y, a la luz de la luna, la figura del sacerdote se asemejaba a un montón de huesos blancos.” (YUKIO MISHIMA)
ilustración: THE LEFT HAND
“Cayó la noche y, a la luz de la luna, la figura del sacerdote se asemejaba a un montón de huesos blancos.” (YUKIO MISHIMA)
Publicado por el zurdo a 0:09:00
Etiquetas: la locura de los priones
2 comentarios:
En las mañanas de catártica resaca, era sólo capaz de hacer dibujos que, para mí, no eran abstractos. El que nos muestras, Zurdo, asemeja aquellas orientaciones de mi cerebro.
Tengo en mente, además, una mañana en la selva. Y la figura de mi sacerdote en canoa, de pie y paraguás en mano, mientras cruzaba el Marañón de banda a banda bajo una leve, gris y adorable llovizna.
amar o gritar
siguiendo con el tema de la resaca
de aquellos días en la selva
en los que sólo podía pintar
si no fuera por mi esposa, estaría mucho más loco.
pero esto es lo que hay
y tu dibujo lo dice
Ángel de la Guarda
Dulce Compañía
No me desampares
Ni de Noche ni de Día
pd: quitar el adjetivo "adorable"
Publicar un comentario